Capítulo 8 de Pulsaciones: Álex, más Cerca que Nunca de la Verdad

Pulsaciones lo ha conseguido una vez más. La serie de Antena 3 nos ha vuelto a mantener tensionados frente a la pantalla de nuestro televisor gracias a un capítulo cargado de emoción y de muchos descubrimientos. El cerco en torno a la red de tráfico de órganos está cada vez más cerrado.

Tanto es así que Álex ha estado a punto de salvar a Verónica, la última víctima de los Meyer. Ha sido el propio Lorenzo Meyer el que le ha propuesto una especie de trato a nuestro protagonista. Si acudía a un punto concreto, sin ningún tipo de compañía y sin vigilancia policial, le entregaría a la niña sana y salva.

Como era de imaginar, el cirujano aceptó el trato y acudió al lugar completamente solo, pero lo que halló no era lo que estaba buscando. Después de mucho caminar, encontró a Lorenzo Meyer tirado en el suelo. La niña, por su parte, no apareció por ninguna parte. De nuevo, la meta se le había escapado cuando estaba a punto de alcanzarla.

Minutos antes, Héctor había atacado a Lorenzo y se había vuelto a llevar a la niña, que ve cómo sus posibilidades de salir airosa de esta complicada situación van disminuyendo cada vez más. Aunque el cerco sobre la organización de tráfico ilegal de órganos se está estrechando, siempre parecen salirse con la suya.

De momento, la Policía ya ha encontrado el quirófano ilegal y ha descubierto que es Héctor Yagüe la persona que se esconde detrás de todas las misteriosas desapariciones. Dos pasos realmente importantes que les acercan al objetivo final: acabar con la organización y con los secuestros.

Mientras tanto, Álex sigue completamente enamorado de Marian, pero ha decidido mantenerse alejado de ella y cuidar de Blanca en un momento tan difícil. Veremos si es capaz de cumplir su promesa. ¡Necesitamos más capítulos!

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