Carlo Costanzia: su edad, su pareja, su relación con Alejandra Rubio y sus problemas con la Justicia

Conocemos a Carlo Costanzia, uno de los protagonista de ‘Toy Boy’. Descubrimos su edad, a sus famosos padres y a su pareja actual.

Carlo Costanzia ha sido famoso desde que era solo un niño, aunque ha sabido dejar atrás la influencia de sus famosos padres para labrarse una carrera en solitario en el espectáculo. El gran público le ha conocido tras su partición en la serie de Antena 3 ‘Toy Boy’ y su faceta como artista. Descubrimos su biografía, su edad y su pareja después de ser pillado besándose con Alejandra Rubio, hija de Terelu Campos.

Se trata del hijo de la modelo Mar Flores y Carlo Costanzia, por lo que la prensa le ha seguido desde que era apenas un niño debido a la fama de su madre y el conde italiano. El divorcio de sus padres supuso un gran golpe, momento en el que decidió marcharse a vivir con su padre a Milán. Tras años de mala relación, ahora disfruta de que sus padres hayan podido mantener un acercamiento.

Estabilidad en Madrid

Actualmente disfruta de una vida más calmada y centrada en su trabajo y su pareja, pero con solo 20 años tuvo que venir a España para dejar atrás un adolescencia conflictiva en la que llegó a acumular hasta 105 multas de tráfico por exceso de velocidad. Como decimos, a sus 28 años recién cumplidos ha dejado ese pasado atrás.

Hasta el año 2019 pasó desapercibido, más allá de sus apariciones públicas junto a su familia, pero todo cambio con el estreno de la serie ‘Toy Boy’. En ella se mete en el papel de un ‘striper’ homosexual y sordomudo, todo un reto para comenzar su carrera. Aunque la serie no contó con el apoyo de la audiencia de Antena 3, en Netflix se ha convertido en un fenómeno mundial.

La interpretación no la única faceta en la que le podemos ver triunfar, ya que debido a su gran físico se ha convertido en modelo en varias ocasiones. Sin duda, su gran pasión es la música, donde sigue probando suerte con paso firme. Sus canciones están dentro del trap latino, el estilo de moda en estos momentos.

En 2019 mantuvo una relación con la bailarina Mel Hidalgo. Ambos se conocieron gracias a la serie ‘Toy Boy’, pero ella ha participado en programas como ‘Tu cara me suena’, y es bailarina de discotecas como Kapital o Mazmel, uno de los ‘beachclub’ más exclusivos de Marbella.

En 2022 saltó a las revistas su relación con la actriz Michelle Calvó, a la que conoció cuando coincidieron como concursantes de un programa de Telecinco, pero lo suyo fue algo breve. Cuando comenzaron los problemas con la Justicia del hijo de Mar Flores su relación se rompió.

Desde entonces no se había vuelto a conocer ninguna pareja de Carlo Costanzia, siendo solo noticia por sus juicios y los reproches a sus padres en su paso por el programa De viernes. Pero todo ha cambiado en febrero de 2024, cuando la revista SEMANA ha publicado unas fotos en las que aparece besándose con Alejandra Rubio, la hija de Terelu Campos, y colaboradora de espacios como Así es la vida y Fiesta.

Los problemas de Carlo Costanzia con la Justicia

Con 25 años sus problemas con el alcohol y las drogas le llevan a cometer varios delitos por conducir bajo los efectos de estas sustancias: «He llegado a estar en tercer grado cuatro meses y, después, ocho meses. Muchas veces he estado en calabozos por conducir bajo efectos de drogas, alcohol y no tener carnet en una de estas veces«, contó en ‘De viernes’.

Pero su vida vuelve a complicarse cuando decide entrar en el negocio del alquiler de coches de lujo junto a una persona que conoció en el rodaje de ‘Toy Boy’, lo que le ha llevado a un nuevo problema. «Los coches no llegan y él siempre me da justificaciones escritas de que están parados en aduanas. Eran falsificaciones, pero las hacía muy bien«, siendo él quien pide los préstados para pagar y tener que responder ante los acreedores.

Ahora mismo está en régimen de privación de libertad, lo que le obliga a llevar una pulsera telemática las 24 horas y tener que dormir en un centro de internamiento. Eso le permite seguir trabajando para continuar pagando las deudas a las que tiene que hacer frente por culpa de su socio, que sigue en busca y captura.

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