Si hay algo que aprendimos de ‘Operación Triunfo 2017’ es que es demasiado pronto para juzgar

Ahora sí que sí, el pistoletazo de salida ha marcado el comienzo de esta gran aventura que es ‘Operación Triunfo’. Los concursantes llevan una semana en la Academia, ya han atravesado ese periodo de adaptación y ya han comprendido, a través de las primeras nominaciones, lo efímero que es todo esto. Poco a poco, estamos conociéndoles dentro y fuera del escenario. La maquinaria ya funciona.

Y, como ya ocurriera en la pasada edición, el público ha comenzado a juzgar. No sólo las actuaciones, sino el comportamiento de los concursantes. Algo lógico si tenemos en cuenta que existe un canal 24 horas, en el que somos testigos de todo lo que ocurre en la Academia. Pero también algo que nos puede llevar a cometer grandes errores como los que ya firmamos en ‘Operación Triunfo 2017’.

En estos días ya hemos visto cómo algunos concursantes han sido crucificados por parte de la audiencia. Sin ir más lejos, África ha sido una de las más criticadas por su comportamiento durante la primera semana. En diferentes vídeos, hemos visto cómo la joven se refería a su compañero Damion haciendo comentarios acerca de su ya conocido problema con una nota alta de ‘Perfect’.

Unos comentarios que, pese a que muchos han entendido como una broma, no han gustado a parte de la audiencia, quienes han decidido cancelarla desde un comienzo. Error. Error enorme. No debemos juzgar a nadie sin prácticamente saber nada de él o ella, no podemos condenar a una persona por el comportamiento que vemos en unos vídeos concretos de una semana concreta.

Ya ocurrió en el pasado con Juan Antonio, por poner otro ejemplo. Fue crucificado desde la primera semana, por el comportamiento que tuvo con Cepeda. Sin embargo, ahora, cuando le hemos conocido verdaderamente, no hay absolutamente ni una persona que no esté enamorada de él. ¿Y Miriam? Más de lo mismo. Juzgamos y condenamos como si fuésemos poseedores de la verdad absoluta, y erramos.

Pensemos en nosotros mismos, en las veces que no nos comportamos como debemos, en esos días malos en los que nuestro estado de ánimo nos supera. Eso mismo es lo que les ocurre a ellos, que, además, están encerrados durante meses. ‘Operación Triunfo’ no debe ir nunca acompañado de la palabra odio, no lo olvidemos. Y esperemos a conocerles de verdad, no volvamos a chocar con la misma piedra.

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