Stan Lee, al borde de la bancarrota tras ser víctima de numerosos fraudes

En la sociedad en la que vivimos actualmente, las personas mayores no gozan de nuestra atención tanto como merecerían. Y, por si esto fuera poco, hay quien aprovecha la debilidad típica de su longeva edad para aprovecharse de ellas, convirtiéndoles en objetivos fáciles de fraudes de todo tipo.

Al parecer, según informa ‘The Daily Beast’, el último en ser víctima de estos seres desalmados ha sido el mismísimo Stan Lee. El creador de algunos de los superhéroes más admirados de la historia, que cumplió 95 años hace unos meses, podría estar al borde de la bancarrota tras haber sido defraudado en numerosas ocasiones.

Han sido personas muy cercanas al conocido como padre de Marvel, amigos realmente íntimos, los que han lanzado la noticia y los que culpan directamente a sus cuidadores. Además, han señalado que es el comportamiento de su hija, quien confía demasiado rápido en la gente y no escatima en gastos, lo que está provocando también que esto ocurra.

Hace unas semanas salieron a la luz una serie de acusaciones emitidas por sus enfermeras, que aseguraban haber sido acosadas sexualmente por el propio Stan Lee. Esto fue tomado por el abogado del dibujante como un caso de extorsión y, de confirmarse la información de ‘The Daily Beast’, no sería ni mucho menos el único.

Recientemente, Stan Lee ha perdido millones de dólares en forma de cheques de los que no tiene conocimiento o de viviendas compradas en secreto. Un auténtico drama que sus seres queridos han querido frenar haciendo pública su situación, realmente complicada si además tenemos en cuenta aspectos personajes.

Stan Lee vive ingresos hospitalarios constantes por culpa de una neumonía que no desaparece y de insuficiencias respiratorias de las que se lleva aquejando años. Además, hace tan solo unos meses perdió a su inseparable esposa, razón por la que actualmente está más débil que nunca. Esperemos que su entorno consiga luchar contra estas estafas y que todo quede en un mal recuerdo.