‘No hay marcha en Nueva York’, de Mecano: letra, historia y video

La era dorada del pop español llegó en los años 80 con grupos como Mecano. Una banda formada por Ana Torroja y los hermanos Nacho y José María Cano que lideró las principales listas musicales a nivel internacional y, obviamente, nacional entre los años 1981 al 1992. Una época dorada para la música española donde la agrupación se consagró como uno de los grandes referentes de éxito en la industria musical, y no es para menos.

Mecano realizó un pop que evolucionó desde una sonoridad puramente tecno durante su primera etapa, entre 1981 y 1985, hasta el eclecticismo de la que es considerada como segunda época artística de la agrupación, entre 1986 y 1992. Un éxito sin precedentes que se extendió, además de España, a países de toda Hispanoamérica, Estados Unidos y Filipinas. Además, también brillaron en países totalmente ajenos a la cultura musical española como Japón, Suecia, Alemania, Reino Unido, Brasil, Portugal y los Países Bajos.

Una carrera musical con la que escribieron su nombre en lo más alto tras lanzar temas como ‘La fuerza del destino’, ‘Hijo de la Luna’, ‘Un año más’, ‘Me cuesta tanto olvidarte’ o ‘No hay marcha en Nueva York’. Por ello, nos adentraremos en profundidad en la historia que se esconde tras este último e icónico tema de Mecano. ¡Estamos seguros de que te sorprenderá!

¿Qué hay detrás de ‘No hay marcha en Nueva York’, de Mecano?

Todo tuvo lugar en el año 1988, época en la que Mecano daba el pistoletazo de salida a su nueva era musical con el sencillo ‘No hay marcha en Nueva York’. Un nuevo tema que formaría parte del álbum ‘Descanso dominical’. Se trata de una canción que fue compuesta por José María Cano y cuya letra desmitifica el sueño neoyorquino que algunos llevan dentro, sobre todo los que no conocen esa popular ciudad.

Un tema cuya letra destaca por su originalidad y particularidad, ya que no posee una letra-estribillo propiamente dicho, sino que todos los versos que conforman la totalidad de la letra de la canción se desarrollan en forma única, sin la repetición de ningún verso o estrofa. Además, se trata de un single cuya letra ha sido muy analizada, pues hace referencias a eventos bursátiles recientes para el momento en que se publica el álbum, también a personajes históricos como Napoleón y San Juan de la Cruz, a antiguos licores españoles, a tópicos y lugares comunes de la vida urbana neoyorquina.

Asimismo, el lanzamiento de ‘No hay marcha en Nueva York’ vino de la mano junto a su videoclip oficial. Un audiovisual dirigido por Manolo Soriano que fue rodado en pleno verano en Madrid. Un video donde se proyecta una serie de imágenes que en la parte inferior de la pantalla se convierte en una especie de tira de «cómics» en movimiento por donde van pasando tipos, personajes y tópicos americanos, mientras una Ana Torroja en marcha, como lo indica el título de la canción, los ve desfilar a su lado.

Un videoclip que a día de hoy sigue sumando miles de reproducciones y que proyecta a la perfección también el estilo audiovisual de la época. Sin lugar a duda, la historia de una canción que ha conquistado de generación en generación y que se ha convertido en uno de los grandes clásicos de la música española.​