El extraño caso de ‘Wind River’

Es triste ver cómo algunas películas prometedoras se pierden por el camino. Cintas que contaban con el aplauso de la crítica y que por falta de presupuesto o a veces incluso por mala suerte ven cómo sus caminos se tuercen y luchan por sobrevivir. Ese es el caso de ‘Wind River’, largometraje escrito y dirigido por Taylor Sheridan.

Este estadounidense sabe muy bien lo que es nadar a contracorriente. Primero trató de triunfar en el mundo de la interpretación y por un momento llegó a conseguirlo, gracias a su papel en la serie ‘Sons of Anarchy’. Sin embargo, se vio obligado a renunciar a este sueño y a apostar por el otro lado del cine.

Sin hacer ruido, Sheridan escribió una serie de guiones que le han vuelto a abrir las puertas de Hollywood, destacando por encima del resto el de ‘Comanchería’, por el que estuvo nominado al Oscar a Mejor Guión en la pasada edición de estos premios. Pese a ello, su carrera ha vuelto a dar un tropiezo.

Tras el increíble éxito de esta película, Taylor Sheridan decidió darle una oportunidad a su tercer guión, ‘Wind River’, pero en esta ocasión poniéndose también a los mandos de la dirección. Resumiremos el proceso lo máximo posible. El estadounidense trató de financiar independientemente la cinta, por lo que acudió a actores que prometieran ventas internacionales (Jeremy Jenner y Elizabeth Olsen), y en cierto modo lo logró.

Por desgracia, a mitad de producción, el dinero se terminó, aunque lograron llevar la película a Sundance, donde fue comprada por una distribuidora. A partir de ahí todo fue rodado, hasta que esta distribuidora, Weinstein Company, se vio salpicada por el escándalo sexual protagonizado por el propio Harvey Weinstein. Ahí, Taylor Sheridan volvió a darnos una lección.

El director y guionista exigió a la compañía que borrase todo su rastro en la película y que esta dejara de distribuirse, además de que se donaran todos los beneficios obtenidos a través de la misma al Centro Nacional de Recursos para Mujeres Indígenas. Así es como él mismo destruyó la posibilidad de que el largometraje se estrenara en cines en países como el nuestro, donde sin embargó aterrizó de manera directa en televisión, en concreto en el canal Calle 13.

Una película de calidad, que ha recibido mayoritariamente buenas críticas, cuya única pega ha sido el hecho de no contar con un protagonista nativo y que, sin embargo, se ha visto obligada a sobrevivir con poco. Por suerte, podemos seguir disfrutando de ella, concretamente este domingo a partir de las 22:05 en La 1 de Televisión Española.