‘Pequeñas Mentirosas’ (PLL): La Boda más Esperada de la Serie ya es una Realidad

Marlene King está cumpliendo en cierta manera las promesas que nos hizo al comienzo de esta última temporada ‘Pequeñas Mentirosas’. Si bien aún seguimos esperando a que resuelva todos los misterios que han quedado en el aire, estamos viendo cómo poco a poco va cerrando algunas historias y nos va regalando esos reencuentros y esos momentos que nuestros personajes favoritos merecen.

Sin ir más lejos, en el decimoctavo episodio, emitido esta misma semana, hemos presenciado una de las escenas más emotivas ya no solo de la temporada, sino de la serie completa. Una escena en la que todos nuestros protagonistas se olvidaron por un momento del infierno que están viviendo y se dejaron llevar.

Fuimos testigos del reencuentro romántico entre Toby y Spencer, de la conversación más sincera de Ezra y Aria y de la primera noche de pasión verdadera de Allison y Emily. Pero eso no es lo que más nos emocionó. Y es que en esa misma escena presenciamos la boda que tanto tiempo llevábamos esperando, una unión que siempre supimos que se produciría.

Para sorpresa de los espectadores e incluso de los implicados, Hanna y Caleb se han dado el sí quiero. Poco después de que se prometieran, la pareja que se ha ganado a todo el público gracias a una relación pura y con la que muchos se han sentido identificados ha pasado por el altar en la más estricta intimidad.

Were finally married #haleb #pll

Una publicación compartida de Ashley Benson (@ashleybenson) el 14 de Jun de 2017 a la(s) 4:24 PDT

Tan solo la madre de Hanna ha estado presente en el enlace, viendo cómo su hija comenzaba un nuevo camino junto a la persona que más ha querido, quiere y querrá. Sin duda alguna, una preciosa escena que ha emocionado y que ha marcado un antes y un después en ‘Pequeñas Mentirosas’.

Muchos se han preguntado qué sentido tiene esta escena cargada de emociones a estas alturas y la teoría de Happy FM es, cuanto menos, dura. Puede ser que esto no sea más que una despedida, la calma antes de que llegue la tempestad y de que algunas de estas parejas se rompan para siempre. Ojalá nos equivoquemos.