‘Juego de tronos’: La traición de Cersei Lannister que muchos esperan

El último capítulo de la séptima temporada de ‘Juego de tronos’ ya está aquí. Parece increíble pero solo unas semanas después de haberse estrenado se despide de nosotros, dejándonos huérfanos de dragones, fantasía y luchas de poder nunca antes imaginadas. Huérfanos durante muchos meses, probablemente sobrepasando el año.

En cualquier caso, dejemos las melancolías para centrarnos en todo lo que puede llegar a pasar en este episodio -si no habéis visto los anteriores, será mejor que os detengáis aquí. Sabemos a través de todo lo que ha ido sucediendo, a través del tráiler del mismo capítulo y de las fotos promocionales que han ido saliendo, que habrá una gran reunión entre reinas y reyes.

Cersei Lannister estará allí, junto a Jaime. Jon Snow acudirá como Rey en el Norte y como habitante de los Siete Reinos preocupado por el destino del ser humano después de ver el tremendo avance de los Caminantes Blancos. También -aunque no lo hayamos visto en los avances, intuímos que así será- acudirá Daenerys Targaryen, que ha decidido dejar a un lado el juego de tronos para centrarse en la primera amenaza, la amenaza real, que podría dejarlos sin trono y sin vida.

Daenerys y Jon tienen un mismo objetivo: convencer a Cersei de que lo más importante es luchar contra los Caminantes. Lo que no sabemos es si Cersei accederá a unirse a ellos, aunque sea por un corto periodo de tiempo, o seguirá con su lucha personal que es, en realidad, lo que más podemos esperar de ella.

Algunos están deseando ver lo que tiene preparado la actual Reina de los Siete Reinos. Puede que haya accedido a encontrarse con sus enemigos pero pocos se creen que realmente vaya en son de paz. Al contrario: es más lógico pensar que Cersei tiene un as en la manga para intentar acabar con todos ellos cuando menos se lo esperen.

No sabemos si es esto lo que deseamos pero sí sabemos otra cosa: somos fieles al personaje que ‘Juego de Tronos’ nos ha dado y ese personaje, su historia, sus motivaciones, nos invita a pensar que Cersei no quiere marcharse de ese encuentro con enemigos. Los quiere fuera de combate y aprovechará esa oportunidad para eliminarlos.

Es lógico creer que pensará en sí misma y en lo que desea antes que creer en las palabras de lo que ante sus ojos no son más que enemigos que le están contando historias sobre un ejército de muertos a los que no ha visto con sus propios ojos.

Si no traiciona al resto, puede ser una traición hacia sí misma, hacia lo que hemos visto en estas siete temporadas. Y aunque no queremos que Daenerys caiga ni queremos que lo haga Jon -tampoco buscamos que Cersei muera en este intento de acabar con sus vidas, por supuesto-, nos aterroriza pensar que pueden defraudarnos con un cambio repentino.

Cersei quemó a cientos de personas vivas mientras se bebía una copa de vino y sonreía, ¿en serio va a ponerse a negociar ahora?