El final de ‘Avengers: Infinity War’, una pregunta que surgió hace años en Kevin Feige y cómo cambia la manera de ver a los superhéroes

Que meses más tarde sigamos hablando de ‘Avengers: Infinity War’ como si se hubiera estrenado hace tan solo una semana dice mucho del impacto que ha tenido esta película en el público. Recuerdo pocos fenómenos tan grandes. ‘Infinity War’ evidenció que lo que Marvel lleva preparando una década para su Universo Cinematográfico tiene un sentido completo, y solo por eso ya constituye un gran impacto. Pero, además, el final. El final.

Hablemos del final. Salas enteras en silencio, salvo algún grito ahogado de quien no podía creérselo. Manos en las cabezas de los espectadores. Alguna que otra lágrima, por supuesto. Estupefacción. Incredulidad. Shock. Quien más y quien menos, todos experimentamos algo así. Y para Kevin Feige fue muy satisfactorio esto. “La manera en la que el mundo recibió ‘Infinity War’ fue increíble, fue exactamente lo que queríamos”, ha explicado en una última conversación con ‘Variety’.

El efecto de un final satisfactorio

Y tenemos que remontarnos años atrás para encontrar un origen a esa satisfacción. “Ese final, en el que estuvimos trabajando muchos años… Recuerdo a la gente, en todas las películas que hicimos y estoy seguro de que en muchas de las películas que haremos en el futuro, siempre que el tipo bueno gana, que es algo corriente –que el chico, la chica, el héroe bueno gane- dicen ‘eh, es algo predecible. El tipo bueno gana’. Bueno, a veces es divertido. Pero durante años recuerdo haber pensado… Me pregunto qué van a hacer cuando no lo hagan (cuando no ganen). Porque sabíamos que se avecinaba. Y no podría haber sido mejor. La reacción fue la mejor”, explica.

Fue la mejor porque ninguno lo esperábamos, porque estamos acostumbrados a que los buenos ganen, como señala Kevin Feige. O, al menos, estamos acostumbrados a que no lo pierdan todo. A que no pierdan de la manera en que perdieron en ‘Infinity War’. Pueden quedar cabos sueltos si se trata de una sucesión de películas, pero en esta entrega de ‘Avengers’ no es que haya cabos sueltos: es que ninguno está atado. Todo está mal. Y esto cambia la manera en que ve el mundo a estos superhéroes: ya no son invencibles, y son más humanos que nunca. Porque alguien más grande los ha vencido, y porque aunque siempre les hemos visto sangrar nunca los hemos visto así de derrotados.

Sabiendo como sabíamos que había continuación, esperábamos una mínima victoria de Thanos, quizá una batalla ganada, algún héroe perdido, ciertos problemas gordos que solucionar en un futuro. Con ese final que llevaba en sus cabezas tantos años (ay, de haberlo sabido…), estas suposiciones iniciales se nos quedan pequeñas. Fue verdaderamente impactante, por eso nuestra reacción fue tan satisfactoria para todo el equipo y por eso esas últimas escenas de ‘Avengers: Infinity War’ serán recordadas siempre. Con dolor, sí, pero también con una sensación de satisfacción por nuestra parte, porque qué bien lo está haciendo Marvel.

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