Es hora de reconocer el talento de Famous, y está en nuestras manos hacerlo

Escribo estas líneas partiendo de la base de que sé perfectamente lo difícil que es elegir favorito en ‘Operación Triunfo 2018’. Y también lo escribo sin querer desmerecer a ningún concursante, pues desde el principio he señalado y sostengo el gran talento que tienen todos ellos. Lo hago, además, siendo consciente de que algo tan bello como la música funciona según una cuestión de gustos que en ningún caso tenemos que compartir. Aclarado esto, continúo con mi tesis, que tiene a Famous como protagonista.

Famous tiene que ser favorito. Y esta semana me parece una semana tan perfecta como cualquier otra para que lo sea. Sé que no es el favorito de todo el mundo, sé que no es siquiera el favorito de la mayoría, pero cada vez que se sube al escenario los comentarios en redes sociales se mueven en una dirección: la alabanza. Puede que Famous no sea el favorito, pero me atrevo a decir que nos gusta a todos.

Y creo que merece saber esto. Desde que ‘Operación Triunfo 2018’ comenzó, Famous ha trabajado como el que más, ha sacado sus canciones de manera excelente, superando las dificultades de cada una, nos ha hecho vibrar, disfrutar y emocionarnos… Pero su nombre nunca ha estado entre los tres elegidos por el público.

También desde el principio, mis votos se han repartido entre él y Natalia, aunque ya en los últimos días se han quedado en Famous mayoritariamente. ¿Por qué? Porque me revuelvo en el asiento mientras escribo esto al pensar que tal vez este chico de 19 años no sabe lo mucho que nos está gustando a todos. Y tiene que saberlo.

Tiene que saber que le estamos viendo y que nos está gustando. Tiene que saber que la gran mayoría sentimos como justicia que esté cruzando la pasarela sin sustos ni amenazas. Tiene que saber que la gran mayoría le vemos en la final y que muchos de nosotros apostamos por él como ganador. Sería un justo ganador, de hecho (insisto, sin desmerecer el talento de sus compañeros).

Famous tiene que ser favorito porque tiene que seguir en la Academia sintiendo el cariño del público; sintiendo que estamos valorando su vozarrón, su talento, su esfuerzo y su trabajo diario. No creo que sea demasiado consciente de lo que está provocando fuera, en todos nosotros. Y no hablo ni quiero hablar de injusticia, ni desde luego puedo señalar a ningún culpable por ello porque no se trata de esto, pero me duele el corazoncito cuando pienso que se está quedando sin ese cariño en forma de votos.

Asistir gala tras gala a la constatación de que puede llegar a ser un gran artista sin que al final su nombre aparezca entre los tres favoritos también me hace revolverme inquieta en el asiento. Está en nuestras manos cambiar eso y demostrarle lo señalado líneas más arriba: que le estamos viendo. Y le estamos apreciando. Mucho.

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